lunes, 23 de diciembre de 2013

Fun, Fun, Fun.

¿Acaso fue un sueño?

Quizás se preguntase por todo aquello más de una vez en su mente. Encerrada y segura de que poco le quedaba ya por ver entre los cristales opacos y empañados de sus recuerdos. Quizás le diesen ganas de ahogar un grito de cuando en cuando, y guiñar un ojo a todo aquello que ya sabía que era nada. Esperando quizás una respuesta que le confirmase que no había sido sólo fruto de su imaginación

Y luego le volvía la cordura a la mente. Y recordaba los arañazos en el tiempo y el sabor salado de las lágrimas ahogadas entre las pupilas. Y el olor a soledad y a incertidumbre disimulado con tiempos interminables de espera inútil.

Respiraba profundo, casi tanto como un suspiro, pero sin rastro de añoranza en él. Exhalaba días de lluvia pendiente de una pantalla. Y noches en vela esperando una respuesta. Y se sentía tan redimida a medida que su pecho se desinflaba por momentos, que pensó que llevaba albergando el vacío demasiado tiempo.

¿Cuánto tiempo tarda en sanar un corazón roto?

Supongo que depende de la distancia.

Y de aquí a Australia hay muchos, muchos kilómetros de olvido. Pero por suerte para mi, nunca me ha dado miedo volar. A pesar de que la lluvia golpee sobre todo hoy, con fuerza mi ventana.